Caleta Pan de Azúcar se ubica en el extremo norte de la Región de Atacama, es un espacio productivo asociado a la pesca artesanal, y lugar de residencia de varias personas de la comunidad. Si bien el territorio se encontraba habitado por familias de pescadores desde los años 60, en 1985 se constituye el Parque Nacional Pan de Azúcar y su administración es entregada a CONAF. Comenzando así un conflicto entre panazucareños y CONAF, ya que ésta intentó expulsarles por ser una amenaza para la flora y fauna nativa. La comunidad de Pan de Azúcar era tratada como una “toma ilegal de terreno” sin considerar que ésta había habitado dicho territorio en distintas épocas por su forma de vida trashumante. El conflicto motivó que los panazucareños constituyeran un sindicato para tener derecho a trabajar en el mar y continuar viviendo en la caleta. Lucha que ganaron por jurisprudencia, por lo que el Sindicato, CONAF y la Armada tuvieron que establecer acuerdos para su convivencia, involucrando una serie de restricciones en la forma de vida de los panazucareños.

El gran tema es que, el Sindicato se conforma por 24 socios hombres, dejando excluidas a todas las mujeres de la comunidad no tan solo de la actividad pesquera artesanal, sino que además en la administración de la caleta y las decisiones asociadas a actividades socioeconómicas y culturales de Pan de Azúcar. Esta problemática más que invisibilizar a las mujeres de la caleta, lo que hace es negarles sus derechos en todo orden de cosas, pues para trabajar deben pedir permiso al sindicato; para instalar un local de empanadas o artesanías deben consultar y tener la aprobación del sindicato; los rucos se encuentran entregados a concesión a los hombres del sindicato y quienes deciden sobre proyectos de mejora u otros, son los votos de los socios del sindicato.

Autora: Aranza Fuenzalida Velasco                   Correo electrónico: aranzamillaray@gmail.com