La globalización económica y la industria forestal han sido un puente para el desarrollo estructural de Chile, donde la transnacionalización del mercado y el flujo global de bienes y servicios han permeado un esquema político y económico que, si bien ha fortalecido la economía nacional en términos macroeconómicos, ha omitido un componente fundamental; el desarrollo de las comunidades vivas locales. Por ello, las comunidades indígenas, en su mayoría en contextos rurales o semiurbanos que bordean los territorios forestales han tendido a pasar desapercibidas en las políticas empresariales y estatales más allá de las retóricas de las relaciones públicas, la sustentabilidad y el respeto por la diversidad cultural.
En este sentido, es pertinente utilizar el concepto de economías indígenas marginales, puesto que son sistemas económicos étnicos localizados, no asalariados y en su mayoría informales, que están al margen de la globalización económica que configura la estructura de las economías (neo)extractivistas que coexisten con las comunidades indígenas en el territorio. Y, asimismo, constituyen un importante elemento dentro de las economías familiares rurales y urbanas, conservan las tradiciones locales, están relacionadas al sistema subsidiario del Estado, o, también, configuran procesos económicos autogestionados.
En este sentido, la presente ponencia presentará una respuesta teórica a diversos hallazgos etnográficos respecto de las expresiones étnico-económicas en contextos forestales de la macro región sur de Chile. Zona que, además, vive hace décadas un importante conflicto que vincula a los pueblos originarios con el Estado y la empresa transnacional.
Autor: Juan Carrera (Universidad Católica del Norte) Correo electrónico: Patriciocarrera.a@gmail.com