Por largo tiempo, las estrategias de conservación ambiental de áreas protegidas han hecho de la definición de polígonos el punto nodal de su concreción territorial. Esa acción suele ser tanto la expresión como la consecuencia de una racionalidad técnico-experta, que define a través de líneas los contornos del objeto de conservación y la i/legalidad de las acciones que se pueden llevar a cabo a uno u otro lado de ellas. En varias regiones de Colombia, el establecimiento de áreas protegidas genera agudas tensiones sociopolíticas entre diversos grupos poblacionales que, dependiendo de su condición étnica o no, pueden verse proscritos de esas áreas o abocados a mantener o transformar sensiblemente sus medios de vida para adaptarse a los mandatos de la conservación ambiental. A la vez que incorpora nuevas formas de ordenamiento del territorio, la creación de áreas protegidas impone ciertos tipos ideales de población que pueden habitar dentro de ellas de manera legal y legítima. Ese proceso evidencia la dimensión inherentemente política de la conservación ambiental, pero que no se hace visible ni explícita en los marcos jurídicos que la regulan ya que estos se modulan en un lenguaje y una sensibilidad técnica que tienen una intencionalidad despolitizadora. Sin embargo, los conflictos socioambientales son parte del día a día de las áreas de protección; por esa razón los funcionarios a cargo de su administración se ven abocados a gestionarlos buscando alternativas que muchas veces encuentran una barrera en la legislación nacional que desconoce esas dinámicas conflictivas. A partir de investigaciones situadas en áreas de conservación ambiental del noroccidente amazónico colombiano, esta ponencia discutirá que la línea que fija el polígono de un área protegida sedimenta criterios tanto técnico-expertos como de clasificación poblacional, étnica, cultural, ambiental y económica, que hacen de este un proceso inherentemente político. Por lo tanto, las variaciones en las (i)legibilidades e (i)legalidades que supone para una población estar a uno u otro lado de esa línea demuestran la urgencia de repolitizar la comprensión de las áreas protegidas.

Autor: Carlos Luis del Cairo (Pontificia Universidad Javeriana, Colombia) Correo electrónico: cdelcairo@javeriana.edu.co